02 octubre 2008

Revista Atril, nº6


www.revistaatril.com

Para comenzar el curso de tertulias con buen pie ya está colgada (a destiempo como casi siempre que uno compatibiliza literatura, vida y trabajos), la versión on-line de el número de Atril que presentamos a principios de 2008.Espero que todos aquellos que estáis más lejos de nuestros canales de distribución podáis disfrutarlo aquí de forma parecida.

Portada: Javier Alcalde

Textos: Marta Aliste, Guadalupe Álvarez Cañada, Isabel Bernardo, Jorge de Arco, Patricia Delmar, Luis Felipe Comendador, Lorena Escudero, Luis Miguel Gómez Garrido, Félix Guerra, Javier Martín «Invex», Boris Montecino, Sofía Montero, Pedro Patzer, Emilio Papel, Luis Quintais (traducción de Enedina Iglesias), Javier Rodríguez del Burgo, Charo Ruano, Roxana Sánchez Seijas, Josefa Sánchez Sousa, Mamen Somar, Luis Somoza, Isabel París Bouza, Teodoro Sáez Hermosilla, Salomón Valderrama Cruz, Gabriel Weisz Carrington.

Ilustraciones e imágenes: María Croche, Max Hierro, Alejandro Santos de Isla, José Luis García Báez (Cheche), Emilio Papel, Boris Montecino, Miguel Gutiérrez, Acacio Puig, Mario Ortín, Roberto Jiménez Barroso.

2 comentarios:

Luis Mundaca dijo...

Descubrir a Roxana Sanchez. Que alivio de escritura!

saludos Fer!

Luis, el mexicano en Glasgow, AKA en la nada.

Anónimo dijo...

Tres breves apuntes sobre el nº 6 de ATRIL.

La pintura psicológica de Marta Aliste, “Escondites”, (del 84), sobre el amanecer en una ciudad bulliciosa, me parece excepcional. Su insomnio de estudiante frente a los libros, el transcurso de las horas y la llegada de la mañana que va despertando a cada persona, cada familia, los niños, el perro… y su idea de que todo sigue y debe seguir, dentro de la caja de zapatos de un edificio, nos ofrece una visión penetrante de la cotidianeidad que contiene momentos y circunstancias que son a la vez intrascendentes y únicos. Lo primero porque pasa cada día, sin que apenas lo valoremos, lo segundo porque si nos distanciamos, son vivencias irrepetibles que conforman nuestra vida y por eso son tan importantes.

También me parece preciosa la poesía de T.S. Hermosilla, “¿Adónde estáis?”, que aporta este sentido trágico, universal y de esperanza, inmanente a aquellos autores que saben escribir sobre un tema tan complejo como es el espíritu humano y su voluntad para lo trascendente.

Arrollador y no apto para “pastelitos”, es el escrito Mamen Somar: “Obsesiones”, cuyo protagonista sufre todas las tiranías del amor y cuando por fin logra liberarse de ellas, recibe doble recompensa: Su libertad y el más importante premio de poesía, siendo su antigua amante la esposa del presidente del jurado... ¡cosa que ya no le importa!, ironías de la vida y un aliño de cinismo. La historia fluye a través de una escritura sentida, pausada, poética, pensada, calculada, elaborada, con un final de excelente humor e ingenio.